Hace algunos días recordamos la muerte de Blasco Ferrer por sus estudios del paleosardo. Sus estudios donde propone una relación entre el paleosardo, el ibérico y el euskera los publicó en el libro Paleosardo. Le radici linguistiche della Sardegna neolitica.[1] Berlín : De Gruyter, 2010. ISBN 978-3-11-023560-9 y también muy resumido en un artículo de Paleohispánica en el 2013.
Como recordó Elexpuru, Eduard extrajo estos topónimos similares que se pueden leer en su libro (Editorial de Alemania: De Gruyter): (h)aran, ardi, baso, berri, bide, ertz, goni (goi), gorri, iri, istil, iz, lats, lur, mando, on, orri, (h)osto, (h)otz, (h)obi, (i)turri, ur, zuri. Respecto al nombre de poblaciones: Aritzo, Ardaule, Asuni, Goni, Loiri, Luras, Olzai, Orgosolo, Ortueri, Osini, Turri, Ulassai, Uras, Uri, Urzulei… Y en la toponimia menor también miles de nombres con raices euskericas.
Esta propuesta de Eduard podría estar relacionada con el trabajo de genética Sardos y vascos, un antiguo origen común de Paolo Francalacci (Director del Laboratorio de Genética Evolutiva de la Universidad de Sassari)
Volvemos a recoger un breve fragmento del artículo de Paleohispánica:
Eduardo Blasco Ferrer, Palaeohispanica 13 (2013): PALEOSARDO: UN NUEVO STAMMBAUM
Para el paleosardo, come les haré ver con un solo ejemplo, esta condición se ha dado. Antes de exponer el ejemplo es menester hacer hincapié en un aspecto del método que no ha quedado suficientemente explotado en la reconstrucción del proto-euskera, pero sí en la del paleosardo. Me refiero a la necesidad insustituible de valorizar los testimonios toponímicos, sabiendo que un (Peñarroja) encierra casi siempre un nomen appellativum (peña roja), y la semántica de éste último aumenta vertiginosamente si existe esta condición.
Veamos el ejemplo:
ibérico topónimo pirenaico topónimo paleosardo
keré = quer = kere
De nuevo la impresión inicial es la de una homofonía. El morfema ibérico no necesita muchas explicaciones, porque siguiendo el método estructural idéntico al seguido para la reconstrucción del proto-euskera y del paleosardo lo ha extrapolado Untermann con bases inconfutables, y hoy ha quedado aceptado por todos los iberistas. Lo que ha ayudado esta vez ha sido la toponimia pirenaica, donde se dan muchos quer, desde el Pallars hasta el Alt Empordà (Quer, Quer- alt, alb, roig, many etc.).
En este caso tenemos la suerte de que disponemos del lexema catalán antiguo quer, que significaba precisamente ‘roca, peña, macizo’ (y así Querroig = Peñarroja). Y no sorprendería mucho que los Cer(e)- hubieran sido los ‘habitantes de las peñas de la Cerdanya’. Pues bien, basándome en numerosos morfemas paleosardos que tienen la misma estructura (ker-á, [kili]-kere) y que se refiren a “rivi petrosi” o “macizos de roca” , propuse la hipótesis en un trabajo recientque kerémule, qu lleva en segundo lugar el morfema productivísimo mele < *bel disimilado, significara algo así como ‘roca/peña negra/oscura (luego quedó corroborado).
Eduard Selleslagh-Suykens
Lamento la pérdida de este gran científico que nos abrió nuevos caminos. Tenía sólo 60 años, y apenas se puede imaginar cuánto más hubiera podido hacer avanzar el estudio del euskera (y del ibérico) fuera de las limitaciones históricas auto-impuestos durante demasiados años. Ha sido una de mis fuentes más importantes de inspiración para mis propios estudios, junto con el otro ‘iconoclasta’ Gianfranco Forni.
Como lo dice bien Koenraad: ” … nos queda su obra y el convencimiento de que la semilla sembrada dará sus frutos”.
Y efectivamente, así ha sido en mi caso (y seguramente en otros): en mis dos publicaciones (en http://www.academia.edu) ‘The Grandfather, the Uncle and the Cousin of PIE’ and ‘Celtic and the Adriatic’, propongo una explicación muy extensa y lógica del ‘por qué’ EBF ha descubierto los hechos que él ha descrito tan bien. Se trata de la prehistoria responsable del vinculo vasco-ibérico-sardo. Es una vía muy prometedora, y espero otros sguirán investigándola y documentándola mejor. Me parece que sería la mejor manera de rendir homenaje a este gran lingüista original.
Antoni Jaquemot Ballarin
Séneca dijo que en Córcega hablaban como los cántabros ¿Se refería a los vascos y a su lengua?
Séneca es un nombre hispánico ibérico. Aparece también escrito Senica. En ibero aparecen SINEKUN y SINEBETIN, que por su contexto, se refieren a un gobierno o consejo. Sines en euskera es “creer”
Felix Zubiaga Orue
Karai>Garaia>Garai/ Geria son, entre otras, la formas de este topónimo en euskera y su significado de “altura”, “sobresaliente”, “cima”. Las formas en Karra, Carria, Guerra y sus compuestos parecen tener el mismo origen.