Victoria nos ofreció una muy interesante charla relacionando los movimientos heréticos de la península con los motivos religiosos de los grafitos de Iruña-Veleia:
Resumen
El origen del cristianismo puede provenir de las sectas judías de ‘los terapeutas’ y los ‘esenios’, que crean el arquetipo de un Mesías espiritual que luego se identifica con la figura humana de Jesús. En los primeros siglos de nuestra Era predomina un cristianismo gnóstico, sincretismo a partir del paganismo y de la filosofía perenne de origen platónico y neoplatónico. Existen indicios claros de que fuera este cristianismo el que se practicara en Iruña-Veleia, que en sus inicios podía confundirse con ciertos cultos, creencias y rituales mithraicos. Tal vez este cristianismo no ortodoxo fue el que escandalizó a cierta clase política muy identificada con un catolicismo conservador, que llevó al cierre del yacimiento y la expulsión de Lurmen.
Extracto de la ponencia
En un artículo de la hemeroteca relativa a Iruña-Veleia, decía Eliseo Gil Zubillaga que no se habían estudiado los elementos esotéricos y mágicos aparecidos en la excavación. Eso me llamó mucho la atención, ya que el gnosticismo puede ser considerado como una doctrina o filosofía esotérica, pues estaba reservada a los elegidos y no era para todo el pueblo, en muchos casos ignorante, como lo fue el cristianismo oficial. ¿Es esto lo que intuyeron o confirmaron las autoridades de la Diputación Foral de Álava para dar al traste con los “excepcionales hallazgos” de 2005-2006? Muchos piensan que fue el euskera escrito el detonante, ya que no confirmaba las teorías de los “popes” de la euskaldinización tardía. Por supuesto que eso también, pero yo creo que hay más. Y ese más son los elementos paganos y gnósticos de aquel primer cristianismo sincrético.
En cuanto al paganismo en Iruña-Veleia podemos decir que es omnipresente. Incluso en el 2012, cuando ya no estaba la empresa Lurmen, se encontró a las puertas de la muralla un altar en el que figuraba la inscripción “Eucarpus, esclavo de la res publica de los Veletani, lo dedicó a Mater Dea”, que no es precisamente la Madre de Dios, sino la Diosa Madre. Y en relación a la supuesta Venus, en una representación un tanto obscena, creo que puede tratarse de la figura de Baubo, central en los misterios eleusinos en honor de Deméter y Perséfone. En su versión latina también aparece el nombre de Ceres, equivalente a Deméter. El ínclito Nuñez declaró sin despeinarse la siguiente tontería: “El desnudo femenino en la antigüedad es símbolo de pureza. Se representan diosas, alguna emperatriz. En esta pieza no se sabe bien qué está haciendo la Venus. Los atributos mamarios no son de la época”.
Respecto al polémico calvario aparecido en Iruña-Veleia del siglo III, lo más extravagante que se ha dicho es la imposibilidad de su aparición, ya que “el primer calvario” es el representado en la basílica de Santa Sabina de Roma en el siglo V. Jamás he oído una tontería semejante de supuestos científicos. ¿No conocen la teoría de la falsación de Karl Popper? “Todos los cisnes son blancos… hasta que aparece un cisne negro”. Pues eso. Incluso Almagro Gorbea afirmó que es imposible que ponga RIP (Requiescat In Pace) en la cruz porque eso “supone que Jesucristo ha muerto, lo que es una herejía”. ¿Y qué? Conociendo el sincretismo de Iruña-Veleia no sé de qué se extraña. Ya en el paganismo existían dioses que morían en la cruz, como Baco y otros tantos en la tradición celta o azteca. También Attis murió crucificado en un árbol. Eran dioses agrarios que resucitaban en cada primavera, como Osiris.
Ponencia 05-Victoria_Sendon_de_Leon