Diario de Noticias: Bittor Arbizu
La huella del Reino de Nabarra en Burgos
Desde años como interesado en el tema te sorprenden los abundantes nombres de localidades de Burgos que se mantienen en euskera (Zalduendo, Galarde, Zumel, Arraya, Arreba, Aranda, Ura, Urrez, Uzkiza?). La sorpresa aumenta, en cierta medida, cuando buscas datos en cartularios de siglos anteriores, s. XI por ejemplo (L. Ledesma), donde la proporción de nombres crece (Larrahederra, Ezkerra, Massoa < Basoa, Zaballa, Zaballazu, Mendiko Zorroza…). Muchos permanecen en el habla popular y en cartografÃa agraria (Sagastia, Landa, Arana, Balza, Garraiz, Troka?)
Al buscar las razones de la permanencia del euskera, ves que a través de los tiempos ha habido varias teorÃas, que entiendo que son tres. La más difundida serÃa la de la repoblación que comenzó en el s. IX por el retroceso de las huestes árabes hacia el sur, lo que permitÃa el desplazamiento de gentes de tierras vascas con su idioma.
La segunda se razona en base a la influencia del Reino de Nabarra, el más poderoso de la penÃnsula en la época, que con Sancho El Mayor (1004-1035), alcanzó su máxima extensión, pues su reino llegaba al oeste de Palencia.
La que indico como tercera teorÃa es la de que el euskera estuviese antes de las citadas, es la que veo más probable, pero teniendo en cuenta que teorÃas y dataciones no son fáciles de precisar y pueden entrecruzarse.
Caro Baroja y Menéndez Pidal sitúan en el siglo I. el lÃmite del euskera en torno a Burgos capital. En esa época los autores greco-romanos citan tribus prerromanas, situando a los autrigones al norte de Burgos, costa cantábrica y parte de Bizkaia, hasta el rÃo Nervión concretamente, y a los vascones en la actual Nabarra.
Al ir situando a estos últimos en base a los nombres de los pueblos, he encontrado una interesante paradoja, vascones situados en la zona teórica de los autrigones. En el norte de Burgos tenemos Villabáscones (Bezana), Villabáscones (Sotoscueva) y Báscones (Zamanzas). Los de Zamanzas tienen de gentilicio bascón y bascona respectivamente.
A esta zona norte habrÃa que añadir los que cité en Las mugas del Reino de Nabarra en Palencia, es decir Báscones de Ebro, también citado como báscones, báscones de Valdivia y báscones de Ojeda. Hay otro Báscones al oeste de Oviedo, en Grado.
En torno a Amaia tenemos Basconcillos del Tozo, con topónimos cercanos como San Mames de Abar, Urbel?
En Pancorbo, que como Miranda en 1463 era villa de Ãlava, hay un Vascones en el s. XI.
En el Arlanza tenemos Basconcillos y Báscones (del agua), este último con pueblos cercanos como Ura el agua, Puentedura?, al que habrÃa que añadir la ermita y término de Báscones, que según me indicaron los vecinos debÃa el nombre a la repoblación.
En Demanda hay alguna calle denominada Villabáscones, pero no podemos precisar si hace alusión a los que allà vivieron.
El pueblo VizcaÃnos se fundó por gentes venidas de Sangüesa (Nabarra), haciendo referencia el nombre al idioma, el euskera. Hay dos Salazar, que mencionaran a la poderosa familia que, como otras, expandieron su poder desde Bizkaia.
Cerca de la Ribera del Duero, pero ya Soria, está Zayas de Báscones.
La abundancia de la referencia a Bascónes, y la permanencia del apellido Báscones en las zonas citadas, lleva a interesantes reflexiones. La principal es la constatación de la presencia de estos habitantes y su lengua, quienes debÃan constituir núcleos y zonas de población que pudieron ser importantes y que mantendrÃan el euskera. Cerca de las mismas quedan topónimos en euskera. Esto da fuerza a lo que cité en el artÃculo sobre Palencia donde recojo: “Regresaba el rey godo Recescinto de haber derrotado al caudillo de los vascones? (año 661)”.
Es curioso que la referencia a Castellanos como pueblo sólo la haya visto en una o dos ocasiones. Todo lo anterior y lo señalado en el artÃculo Los de Agés (Atapuerca, Burgos) somos nabarros, te lleva a la conclusión que el euskera ha permanecido hasta siglos posteriores al citado, con al menos zonas de bilingüismo. Según he visto posteriormente, algún otro autor mantiene esta misma hipótesis.
Esta recopilación la considero un testimonio importante porque además ves que mantienen el acento y la grafÃa que le corresponde en euskera: báscones.
Rufino Gómez Villar, que ha hecho una importante recogida de toponimia vasca en la Bureba, Reino de Nabarra hasta el s. XII, sugiere que la zona fue bilingüe hasta el s. XIV, y se apoya en un testimonio que ya citamos, que los vecinos de Ojacastro en el siglo XIII tenÃan fuero para utilizar el euskera ante la justicia. Señala que en la zona se encontró alguna ceca, moneda, pamplonesa del siglo I. a. C. que refleja Barskunes.
Esta denominación, conocida anteriormente, con los siglos darÃa lugar a báscones, gascones (Wasconia), vascos? En latÃn se cita loco qui dicitur de vasconica lingua musiturria. Vasconia, escrito por Oihenart en 1638 sobre ambas partes del Pirineo, es lo que en euskera denominamos Euskal Herria, y que en Vitoria su equipo de baloncesto escribe Baskonia.
En Burgos defienden Valpuesta como cuna del castellano, por ser dicho cartulario anterior al de San Millán de la Cogolla. Lo evidente es que el castellano nació en contacto con el euskera, e influido por éste, para ser un romance evolucionado, que no se diferenciase la b/v, que tenga cinco vocales? Incluso Castilla es escrito por primera vez en contacto con el euskera (Taranco, año 800).
Gonzalo MartÃnez, en un exhaustivo trabajo cita topónimos de hipotético origen vasco y otros anteriores a la repoblación, entre los últimos Amaia, Oca, Oña, Turzo, Ubierna, Urbel? Estos últimos los veo unidos al euskera. Oña es el pie de una montaña, lo mismo que Garoña es base o pie de una altura. En Ãlava hay Oñate, Oñarrate, Oñabizkarra? (Gereñu). Turzo vendrÃa de Iturritxo. Iturritxa fuentecilla > Iturriza > Iturza > Turza.
Hay formas del euskera oriental Baltza, Arreba, quizá anteriores a las del occidental Urbeltz agua negra, Turzo.
Una vecina de Vivar citó lo de Minaya, lugarteniente del Cid, es decir mi anaia, mi hermano. La transmisión oral e historia de los cercanos lÃmites de la Nabarra de antaño, asà como términos en euskera, permanecen vivos entre vecinos de las zonas citadas. Un detalle emotivo es que los de Agés pusieron el artÃculo en la cantina. Mi agradecimiento a su hospitalidad.